(2009)
Siento una ira por dentro que arrasa los mares y los tiempos, que mata pajaros con resorteras y caza cucarachas por las noches, deseo golpear tu cara sobre cada poro con tal fuerza que brote tu sangre y me bañe, pienso silenciosamente en ahogarte en un cuarto quemando chiles de árbol, que te asfixies en un ardor y que consuma tus pulmones y acabe con tu voz para que ni tus lamentos puedan salir, siento unas ganas atroces de sentir tu cabello y arrrancarlo uno a uno hasta que enloquezcas, deseo mutilar y cercenar tus partes pudendas y hecharlas a perros hambrientos.
Como no odiarte de esa manera, cuando día a día con tus silencios o tus gritos o aún peor con tus frases suaves y convincentes me anulas y matas y hieres y vuelves turbia mi razón, con tus besos me despojas del ama y tu piel como lija sangra y destruye mi piel de papel.
Deseo fervientemente cada minuto con cada momento mis palabras se vuelvan dagas y te hieran y te sangren y se formen ríos de tus nauseabundos fluídos, de tu emancipación y tu tristeza nativa, arrojarte a un estanque infestado de sandijuelas y vertir sal sobre tus desgarradas carnes, verte retorcer entre llamas o maldecir la hora de tu nacimiento, infrigirte tanto dolor que termines exausto, ahogado en tu propio rancio sudor y aún así no podrías sentir la tortura ínfinita de mis días de desamor, de mis tardes y mis noches vacías, del terror de mis sueños y el clamor de esos tiempos, ruín como eres acuerdate del verano pasado donde me moría asfixiado en esa habitación lugubre, desnudo, apretando mis manos contra el pecho, y mordiendome los labios hasta sangrarlos.. no hay ley o castigo que pegue y pague los pedazos de este corazón roto por tan patan y soberbio enemigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario